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Esto va más allá de las impresoras FDM multifunción que conocemos desde hace tiempo, porque el Hexbot es un auténtico robot modular, que también imprime.
Creado en Kickstarter por Hexbot Robotics, tiene aspecto de haber salido de una peli de ciencia ficción como 2001, o Alien, pero es de verdad.
Es un brazo robótico modular de pequeño tamaño, elegante, silencioso y muy preciso, capaz de equivocarse solamente en 0,05 mm, 50 micrones…
Y ¿qué hace?
Pues muchas cosas. El Hexbot puede escribir y dibujar, colocar piezas, marcar con su láser -opcional- y también imprimir en 3D, como una FDM convencional.
Y es que añadiendo el módulo opcional -que cuesta 80 dólares-, que se instala en segundos con un simple ¡click!, se convierte en una impresora 3D chulísima, fuera de lo convencional.
Con una resolución de capa de 100 micrones, puede trabajar básicamente con PLA de 0,75 mm y su brazo cubre un área de 380 mm, con 220º de libertad en 4 ejes.
Sí, puede imprimir una pieza de 38 cm de longitud, lo que no está nada mal.
No tiene cama de impresión, por lo que seréis vosotros los que le coloquéis una debajo de su área de impresión.
De hecho, mejor, porque podéis colocar la mejor del mercado en el mayor tamaño posible, flexible y con mucho agarre, como la Easy Peelzy, la EZ Stick 3D, o la Flatforce.
El Hexbot puede ser vuestro, si sois rápidos, por menos de 300 euros -340 euros con el módulo de impresión 3D-. Podéis visitar su página de Kickstarter para más información.
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